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Un logro que se mete en la historia nacional e internacional.
¡Prepárense para aplaudir de pie! Nuestra tremenda Bárbara Hernández, la "Sirena de Hielo", acaba de hacer historia con mayúsculas. Fue elegida para ingresar al Salón de la Fama de la Natación Internacional (IMSHOF), un reconocimiento que la consagra como una leyenda viva de las aguas abiertas y el nado de maratón. Y ojo, que no es cualquier cosa: es la primera chilena en recibir este tremendo honor, un logro que pone la piel de gallina.
La ceremonia oficial será en mayo de 2026 en San Diego, California, donde nuestra compatriota recibirá su placa y su nombre quedará grabado para siempre junto a los más grandes. Con esto, Bárbara se une a un equipazo de leyendas latinoamericanas, consolidándose como un referente para todo el continente.
- Lilian Harrison (Argentina)
- Pilar Geijo (Argentina)
- Poliana Okimoto (Brasil)
- Ana Marcela Cunha (Brasil)
- Nora Toledano (México)
- María Dígna Ezcurra de Ortellado (Paraguay)
Una carrera forjada a pura garra y corazón
Para quienes la seguimos, sabemos que esto no es casualidad. Con 39 años, esta psicóloga ha dedicado más de una década a la natación extrema, con hazañas que quitan el aliento. Desde completar el desafío de los Siete Mares hasta ser la primera sudamericana en lograr el doble cruce del Canal de la Mancha, Bárbara ha demostrado que no hay agua demasiado fría ni distancia demasiado larga cuando se tiene el power y la convicción.
Ella misma lo dice con orgullo: "Demostrar que se pueden lograr grandes cosas desde un deporte no tradicional, sin ser olímpico, y viniendo de una ciudad sin mar y desde Recoleta, tiene un valor enorme". Sus palabras resuenan con la fuerza de alguien que ha luchado contra todo pronóstico. "Al fin estoy entre los mejores nadadores del mundo de ultra distancia. Ahora tengo mi propia estrella de mar de la fama", comenta con esa mezcla de alegría y humildad que la caracteriza.
El mensaje que inspira a darlo todo en el agua
Más allá de las medallas y los récords, el legado de Bárbara está en su mensaje. Nos recuerda que los sueños no se cumplen de un día para otro, sino que se construyen con paciencia y perseverancia. "Mi mensaje para las nuevas generaciones es que recuerden que los sueños se construyen en años y a las generaciones mayores, que nunca es tarde", afirma.
Su historia comenzó a los 17 años, en ese primer cruce de Niebla a Corral donde demostró que estaba hecha para la adversidad. Hoy, esa misma garra la lleva al panteón de los inmortales, poniendo el nombre de Chile en lo más alto de la natación mundial.
Los sueños se construyen brazada a brazada. La increíble historia de Bárbara nos enseña que no importa si empiezas en una piscina de barrio o en un lago patagónico; la disciplina y la pasión son el verdadero motor. La próxima vez que sientas que un desafío es demasiado grande, recuerda que cada brazada, por pequeña que parezca, te acerca un poco más a tu propia meta.
